En la presente semana el concejo de Manizales se ocupó de revisar los llamados planes parciales, es decir aquello encaminados a desarrollo urbanístico; no obstante, se pensaba que también podría ser objeto de revisión el Plan Especial de Manejo y Protección del Centro Histórico de Manizales, el cual se derivó del Plan de Ordenamiento aprobado en el 2017, por parte de dicha corporación; plan de manejo encaminado a la reorganización y mejoramiento de este importante sector de la ciudad.
Cuando han pasado 8 años, lo único que se sabe es que se han hecho dos contratos por más de mil 500 millones de pesos y aún no se tiene nada; mientras tanto el Centro Histórico de Manizales continúa en una situación de deterioro con problemáticas como desorden del espacio público, drogadicción, prostitución, inseguridad y deterioro del patrimonio arquitectónico, entre otros.
Sería bueno que el concejo municipal se apropie de este tema con firmeza y seriedad a fin de evitar el deterioro día a día del CH y en aplicación al POT, pues no solo se trata de aprobar actos administrativos, sino de hacerle seguimiento y el cumplimiento de los mismos en favor de la ciudad; así mismo con el fin de vigilar y cuidar los recursos de los manizaleños, pues a falta de resultados con el PEM, fácilmente podría estarse configurando un detrimento patrimonial.
